Cuando la persona con discapacidad alcanza la mayoría de edad y comienza la etapa adulta, nos surgen dudas acerca de
su futuro y el nuestro como progenitores.
En este momento se producen además una serie de cambios administrativos que afectan a diferentes áreas, como la
provisión de apoyos formales para la toma de decisión, cambios en las condiciones de las prestaciones económicas e
incluso la posibilidad de acceder a diferentes servicios.
Este documento ofrece información que puede facilitar todo este proceso de transición hacia la vida adulta.